En esta sección repasamos brevemente lo que ha sido el fenómeno de la serie más vista por el momento en la plataforma Netflix: El Juego del Calamar. El impacto ha sido tanto que ya hay hasta vídeos detallando aspectos conspiracionistas aparte del reflejo de la sociedad surcoreana actual.
De paso, recordamos el famoso "Crimen del Rol" ocurrido en 1994 en España cuando dos individuos asesinaron a un hombre en Madrid y todas las informaciones de aquel momento echaron la culpa a los juegos de rol que estaban muy de moda.
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Tras
el enorme éxito cosechado por la serie surcoreana de Netflix 111 millones de
personas según los últimos datos), “El Juego del Calamar”, parece que a los
psicólogos preocupan bastante ese efecto imitación que se ha dado en muchas
escuelas del mundo recreando esos macabros juegos infantiles en la serie para
eliminar a los concursantes.
“El Juego del Calamar” es una serie de ficción en la
que un conjunto de 456 participantes con deudas económicas son convocados a
participar en una serie de pruebas extraídas de juegos infantiles con el
propósito de hacerse con una gran suma de dinero: 45.600 millones de wones
coreanos, lo que equivale a unos 33 millones de euros. En caso de perder
cualquiera de los desafíos los concursantes acaban siendo asesinados.
Psicólogos
ya han advertido ante esto que es una serie con edad límite de 16 años para
verla. Entre muchas recomendaciones, lo que han hecho es aconsejar a los
padres, madres y hermanos/as mayores que no hablen de la serie ni recomienden
tampoco que se disfracen de los personajes de la serie (disfraces que se venden
ya en muchas tiendas de España).
https://owlpsicologia.com/la-prevencion-frente-al-juego-del-calamar/
Lo
curioso de esta serie no es la moda que ha generado, sino por reflejar una
triste realidad no oculta en el país asiático. Y es que, aunque la historia fue
creada en el año 2008, según el portal businessinsider.com “en 2021, el
importe total de la deuda que acumularon los surcoreanos —más de 1,5 billones
de dólares (cerca de 1.300 millones de euros) —rivalizó con el PIB del país, de
1,63 billones de dólares, unos 1.370 millones de euros). Una encuesta de 2018 del
think tank coreano Seoul Institute descubrió que los coreanos tienen alrededor
de 44.000 dólares de deuda por hogar”. Es decir, uno de los temas
principales de la serie que es el dinero, las deudas y el estilo de vida
asiático es tan real como las cifras que se ofrecen en este medio:
Ya
es considerada una serie que refleja a la perfección la sociedad de la
generación de los millenials del país, pero también de todo el mundo,
donde cada vez más se recurre al juego, al robo o incluso al suicidio cuando no
se puede adquirir un futuro económico prometedor y a eso hay que unirle la
presión social tan dura que tienen estos países.
Ha
sido tan grande su éxito que la serie ya tiene un “token” basado en la
serie, utilizando la nueva tendencia de las criptomonedas y el Bitcoin, aunque
para muchos ha sido considerada hasta una estafa.
https://www.informacion.es/economia/2021/10/29/lanzan-token-basado-juego-calamar-58941852.html
Los crímenes del rol y otros juegos de muerte
El
30 de abril de 1994, un empleado de la limpieza de 52 años llamado Carlos
Moreno perdió a vida cuando caminaba en horario de madrugada por el barrio de
Hortaleza (Madrid) y dos individuos, de nombres Javier Rosado y Félix Martínez,
les increparon en primer lugar pidiéndole dinero y viendo que la víctima se
negó comenzaron a forcejear con él hasta que le asestaron una serie de
puñaladas (19 en total) y lo dejaron tenido ya sin vida en un parque cercano.
Aquel asesinato se volvió a convertir en un espectáculo denigrante en el
tratamiento, sobre todo, de los medios de comunicación (como ya ocurrió en 1992
con el caso de las niñas de Alcásser) pero después de titulares y muchos
cuerpos de la noticia acusando a los juegos de rol y los que consumen este tipo
de ocio imaginativo que muchas veces puede pasar a una acción real, finalmente
se supo que los asesinos no eran jugadores de rol -por mucho que Javier Rosado
había inventado un juego llamado Razas-, pero ya la campaña de acoso y derribo
a un tipo de ocio creado en los años ochenta y que iba a despuntar en los
noventa en adelante. En algún medio nacional famoso se llegó a publicar que
este tipo de juegos creaban necrosis en el cerebro, como el artículo que
escribió Rafael Torres en el periódico “El Mundo”, titulado: “Una Necrosis
Similar”, donde se afirmaba que estos juegos producían «necrosis
fulminantes en los tejidos de la cabeza y del corazón, aparte de desprecio por
la realidad e ignorancia», añadiendo además que promovían la psicopatía(*).
El Tribunal Superior de Justicia descartó por completo que los juegos de rol
tuvieran que ver con el asesinato de Carlos Moreno, pero aun así, este crimen
se sigue titulando como “El Crimen del Rol”. Un crimen muy famoso porque fue el
primero en Europa donde se planteó la doble personalidad desde el punto de
vista de la psiquiatría forense (cuestión que ya en Estados Unidos, por
ejemplo, había ocurrido con un crimen famoso a finales de los años ochenta).
Javier
Rosado Calvo tenía 20 años y era estudiante de Química, y Félix Martínez, de 17
años, se convirtió en su compinche y seguramente engañado por un acto cruel que
el primero contó en su diario personal. Ese estudiante privilegiado de Química
estaba considerado buen estudiante pero guardaba un sadismo tan cruel dentro de
si que en su diario personal llegó a reflejar las ganas que tenía de matar a
alguien con párrafos como este (publicado en el portal El Español):
“… era espantoso: ¡Lo que tarda en morir un idiota! Llevábamos casi un cuarto de hora machacándole y seguía intentando hacer ruidos. ¡Qué asco de tío! Mi compañero me llamó la atención para decirme que le había sacado las tripas.”
“Mis sentimientos por hacer el asesinato en sí mismo
no existían en absoluto, demostrándome que mi mente era fría y calculadora en
cualquier situación y dándome esperanzas para otras acciones. No sentí
remordimientos ni culpas, ni soñé con mi víctima, ni me inquietaba el que me
pillaran. Todo eso eran estupideces”.
Carlos Moreno, la víctima principal de Javier Rosado y Félix Martínez.
Aparte
de ser el creador de su propio juego, con el que tenía dominado a Félix para
cometer sus fechorías, estaba claro que tenía un perfil psicópata guardado
dentro por las cosas que escribió en su diario, sus verdaderas intenciones. Los
planes iniciales eran los de asesinar a una mujer pero al final se decidieron
por Carlos debido a que tenían que localizar a una víctima y acabar con ella
antes de las cuatro y media de la madrugada. Las fotos que publicó la Policía
de los objetos que guardaba destacaban, entre otros, quince cuchillos y
publicaciones violentas (incluyendo miles de volúmenes sobre ocultismo, el
Marqués de Sade y Adolf Hitler), más aquel extraño diario donde dejó escritas
sus intenciones psicopáticas. Rosado fue condenado a 42 años de cárcel como autor
material y cerebro del crimen. Al no ser declarado como enfermo mental,
simplemente se le condenó a una pena de prisión y no a pasar su tiempo
confinado en un pabellón psiquiátrico.
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| Imagen proveniente del especial 'Víctimas del misterio' de RTVE.es |
Ante
este acto, no pareció haber arrepentimiento por parte de los jóvenes, sino al
contrario, se jactaron de ello y hasta estuvieron dispuestos a buscar a una
segunda víctima y esto se lo confesaron a varios de sus amigos hasta que uno de
ellos se lo dijo a sus padres para que alertara a la policía. Finalmente, sería
Félix Martínez el que confesaría este crimen. Este joven que aún no alcanzó la
mayoría de edad cuando ocurrió el crimen solo fue condenado a 12 años y 9 meses
de reclusión en una institución para menores. La sentencia se produjo en el año
1997 en el caso de Javier Rosado, junto a una indemnización de 25 millones de
pesetas que debían pagar a la familia de la víctima. A la edad de 21 años,
Félix quedaría libre al serle rebajada la pena por tratarse de un menor de edad
y haber sido inducido por una persona mayor que él. Se cuenta que en 1999 se
traslada a Berlín. En el caso de Rosado, logra la libertad en el año 2010 con
36 años de edad y rumores posteriores contaron que se fue a vivir junto a Félix
sin especificarse dónde exactamente.
La película Nadie conoce a Nadie, interpretada por Eduardo Noriega trataba precisamente sobre crímenes relacionados con un extraño juego.
ENLACES:
https://www.crhoy.com/entretenimiento/netflix-elimina-escenas-de-el-juego-del-calamar/
http://www.dragonesymazmorras.org/index.php/2013/04/19-anos-del-crimen-del-rol/
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